El rechazo, como tal, no existe, porque el titanio es un material biocompatible. Hay implantes que no se osteointegran, pero no es debido al rechazo. Hay que extremar los cuidados en la cirugía y en el postoperatio para que tenga éxito el procedimiento. En nuestra clínica garantizamos la osteointegración y reponemos sin cargo cualquier implante que no se osteointegre.